Ordenan un vallado para cercar un asentamiento

La justicia federal intimó ayer al gobierno porteño, al Organismo Nacional de Administración de Bienes del Estado (Onabe) y al consorcio que opera el ferrocarril San Martín a "poner fin", en un plazo de 24 horas, "a la situación de riesgo" en la que viven los habitantes de un asentamiento instalado junto a las vías, a metros de las avenidas Jorge Newbery y Warnes, en Paternal. Se trata de una medida adoptada por el juez federal Ariel Lijo, quien interviene en una causa por la muerte de Iara Robles, una beba de 9 meses que vivía con su familia a un metro de los rieles y que el 9 de noviembre de 2006 gateó hasta las vías y fue arrollada por el tren. El 16 de agosto último, la Cámara Federal porteña le encomendó determinar la responsabilidad de los funcionarios encargados de controlar el servicio ferroviario. El juez quiere que hasta que se resuelva qué hacer con el asentamiento se coloque un vallado que impida a los habitantes acceder a las vías. Entre marzo y julio del año pasado LA NACION publicó una serie de notas sobre este y otros casos de dos chicos que vivían en la zona y que habían muerto mientras jugaban en las vías. En agosto, el gobierno de Jorge Telerman decidió trasladar a las familias del asentamiento de las vías y otorgarles una vivienda temporaria en el Parque Roca. Unas 45 familias -entre ellas los padres de Iara- aceptaron el traslado. Sin embargo, otras cinco familias permanecieron junto a las vías y no fueron desalojadas. Poco a poco, aunque las casillas fueron demolidas e incendiadas, otros habitantes se volvieron a ubicar en aquel margen de cuatro metros que hay entre las edificaciones y los rieles, de modo de que las puertas de los ranchos quedan a un metro de las vías. El plazo dado por Lijo vence hoy. Según supo LA NACION, el juez basó su decisión en el hecho de que la licitación del servicio establece que la concesionaria debe garantizar que no haya edificaciones a menos de siete metros de las vías. La comunicación fue remitida a la Jefatura de Gabinete porteño, a la dirección del Onabe y a la Ugofe, que administra el San Martín. LA NACION se comunicó con las partes para conocer qué medidas iban a adoptar. Un vocero de la Ugofe informó que se dispuso que a partir de las 0 de hoy los trenes pasarán a entre 25 y 30 km/h en la curva del asentamiento. También consultó al jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y al director del Onabe, Fernando Suárez, pero no contestaron las llamadas