martes, 22 de abril de 2008

Luego de la marcha atrás del PRO, la Legislatura formaliza el proyecto de obras en el subte

Esta tarde se firmará en comisión el despacho consensuado entre los principales bloques. Ocurre después de que el macrismo abandonara su intención de modificar las trazas, debido a las críticas de los vecinos y la oposición. La iniciativa, que respeta el diseño original, será aprobada el jueves.
La Legislatura porteña formalizará este martes el proyecto para la construcción de nuevas líneas de subterráneos, luego de la marcha atrás del macrismo en su intento de modificar el trazado.
La reunión de las comisiones de Tránsito, Obras Públicas y Presupuesto se llevará a cabo a las 15 en el Salón Montevideo, donde se firmará el despacho de la iniciativa que cuenta con el respaldo de los principales bloques y que será aprobada en la sesión de este jueves.
El proyecto empezó a destrabarse el viernes pasado, cuando el PRO anunció en una reunión entre legisladores que desistiría de modificar el trazado en las nuevas líneas, algo que había despertado fuertes críticas de la oposición y de asociaciones vecinales.
En ese sentido, representantes de vecinos de Caballito protestaron este lunes frente a la Legislatura contra las modificaciones a la traza y a su forma de financiación.
Los vecinos aseguraron que en el proyecto macrista original se producía un alejamiento de la red de subtes de las cabeceras del ferrocarril, y que en la línea H se eliminaban el tramo de Patricios a Pompeya y el tramo a Retiro.
También se quejaron de la modificación del trazado de la línea I, de la eliminación del Centro de trasbordo polimodal (en cercanías de Estación Caballito) y de la falta de estudios técnicos, entre otros puntos.
El legislador macrista Cristian Ritondo, quien preside la comisión de Obras Públicas, dijo a Télam que su bloque “renunció a la modificación de la traza para obtener un mayor consenso, aunque teníamos más de treinta votos para aprobar el proyecto”.
Por su parte, el titular del bloque de Diálogo por Buenos Aires, Eduardo Epsteyn, cuestionó la modificación al trazado que intentó imponer el macrismo, y aseguró que el jefe de Gobierno Mauricio Macri “anunció una gran obra fundacional y no tenía nada estudiado”.
Además, Epsteyn consideró que esa reforma “favorecía a las empresas de transporte automotor porque se alejaban las trazas de las cabeceras de los ferrocarriles, de modo que el que llegaba del Conurbano se tenía que tomar un colectivo”.
Frente a esa acusación, el macrista Álvaro González sostuvo que se trata de “un argumento rebuscado y una teoría conspirativa de alto nivel”, y cuestionó al sector del ex jefe de Gobierno Aníbal Ibarra porque “su forma de hacer política es sembrar la sospecha permanentemente”.
“Pretendemos que el subte deje de ser una cuestión electoral y pase a ser una política de Estado en serio”, dijo a Télam el presidente de la comisión de Presupuesto.
En tanto, el titular del bloque Igualdad Social, Martín Hourest, quien fue el artífice de las modificaciones que lograron destrabar el proyecto, celebró la marcha atrás del macrismo respecto al trazado de las líneas y destacó las principales innovaciones de la iniciativa.
Hourest resaltó la introducción de la figura de “administración” del Estado sobre los subtes en la nueva letra del proyecto (antes sólo aparecían la concesión o el gerenciamiento), y explicó que esto permitirá al sector público tener la posibilidad de operar las líneas nuevas a través de la sociedad estatal Subterráneos de Buenos Aires (SBASE).
Entre otros puntos, Hourest también destacó que el proyecto establece la posibilidad de establecer una política de subsidios a la tarifa y no a la operación, como marcaba la iniciativa macrista, pero que, a su vez, deberá tener la autorización de la Legislatura para ser aplicada.

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